sábado, 28 de diciembre de 2013

Mamá ¿Por qué Papa Noel no me ha traído lo que le pedí?

De todos es sabido que los niños pequeños suelen cambiar de idea cada vez que sopla el viento. Por lo menos los míos. Daniel ha cambiado de idea miles de veces con respecto a su carta de Papa Noel y Reyes. Ya no recuerdo toda la retahíla de juguetes que me ha nombrado con sus ojitos brillando de ilusión.

Estas Navidades, fuimos a un pueblo de unos tíos de Raúl para que se reuniera la familia. Allí vino Mama Noel como cada año a entregar millones de paquetes. Puzles, juegos, pistolas de juguetes, un quad de juguete, Lego... Los paquetes se sucedían y casi no acertaba a abrirles a mis retoños sus cajas para que pudieran jugar medio segundo con su contenido.

Entre tanta alegría y emoción, mi primogénito se me acercó una vez terminada la vorágine navideña y me suelta un desconsolado: "Mami, ¿por qué Papa Noel no me ha traído lo que le pedí?". Me quedé blanca. "¿Qué le habías pedido?" le pregunté como quien no quiere la cosa. "Una máquina de hacer magdalenas". Le expliqué que, a lo mejor, era porque ya se lo iban a traer los Reyes y se quedó conforme. "Pero... ¡mira todo lo que te ha traído Papa Noel! Eso significa que te has portado muy bien". "Sí, es verdad" asintió con media sonrisa y se dedicó a pelearse con su hermano por una escopeta de plástico ya más animado.

Pero una, que es una madre sensible, no paró de darle vueltas al asunto. Y cuando volvimos al hogar, y con la excusa de que no teníamos nada para cenar, volé al hipermercado y me pasé por la sección juguetes como quien no quiere la cosa. El juego de hacer magdalenas estaba agotadísimo, pero, por suerte, les quedaba el de hacer helados, que tampoco estaba nada mal, así que al carro con la caja sin pensármelo dos veces. Y... cómo voy a poner una paquete para uno y olvidarme del pequeñín, aunque no haya dicho nada. ¡Imposible! La mochila de Dora también a la cesta ¡Ole! No hay dolor.

A mi maridín le compré unas almejas en salsa en la sección de comida preparada que tenían una pinta de estar chuparse los dedos, así tenía un detalle con él por su cumple y sumaba puntos para que no me pusiera mala cara al ver mis compras inesperadas.

Me puso mala cara, pero mis ojitos de bambi y la desilusión en mi mirada por su tajante negativa le hizo cambiar de opinión.

Envolví los regalos, mientras el cabeza de familia despistaba a mis retoños y los puse en la habitación de los juguetes. ¿Podéis creer que no pisaron la maldita habitación en toda la tarde?

Cuando llegó la hora de meterse en la cama, su padre les obligó a recoger los juguetes y por fin asomaron sus naricillas por allí. Gratamente sorprendidos corrieron a por los paquetes. Al principio se pusieron a desenvolver el equivocado, pero pronto se los intercambiaron. "¡Dora, Dora, Doraaaaaaa!" gritó el pequeñajo entusiasmado. "¡Mi máquina de hacer magdalenas, mi máquina de hacer magdalenas! Tenías razón mamá, estaba aquí" exclamó emocionado el mayor.

Le hice ver que era de hacer helados, pero como yo ya preveía le parecía igual de emocionante una cosa que la otra. Los dos se pusieron a jugar inmediatamente con los regalos de ambos. Incluso hubo alguna que otra pelea como no podía ser menos. Simulaban que hacían los helados en la máquina porque les dije que ya los haríamos al día siguiente porque ya era muy tarde. Sacaban las cosas de Mochila y jugaban con el Mapa, con los prismáticos, con las llaves... El chiquitín se puso el reloj de Dora y casi se lo tengo que arrancar de la muñeca cuando le metí en la cama.

Cuando por fin se durmieron el papi me volvió a recriminar los valores materialistas que les estaba inculcando a lo tonto, pero me dio igual, porque mi conciencia ya estaba tranquila.

10 comentarios:

  1. Si es que yo creo que, por mucho que uno quiera escapar del consumismo, el verles la carita te hace caer igualmente en la tentación. Jajaja. Un besote!!!

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    1. Sí, al final los hijos son la debilidad de las madres. Sight!!!

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  2. Aix...te entiendo a la perfección...si es lo que le hacía ilusión...jajajajaja!
    Muas!

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    1. Al mayor le alimentamos aún más la ilusión y al peque le dimos un alegrón. No me arrepiento de nada jajaja Besazos!!

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  3. Como te entiendoooooo consuegra!!!!!a mi me pasó lo mismito!!!compré hacía 2 meses los regalos por aquello de ahorrar y evitar que se agotaran, después unas semanas antes de la navidad, la peque cambió de opinión como 10 veces, hasta que se "empeñó" en que quería una muñeca en concreto.....al final me tocó comprarla a toda prisa, porque me daba penita no tenersela puesto que hice un trato con ella de que ella le dejaba el chupete a Papá Noel a cambio de esa muñeca, me gasté más de lo previsto, pero objetivo cumplido!!!chupete fuera e ilusión y alegría en su carita a "raudales"!!!!!eso si, al igual que tu, bronca con marido por darle todos los caprichos, pero como se nota que ellos no los han parido!!!!Respecto a los virus, gracias por preocuparte Dácil, eres un amor!!!!!pues mira, se le pasó la fiebre y los vómitos pero se ha tirado 3 semanas con caquitas constantes (una media de 8-9 veces al dia) y tras hacerla cultivo porque la pediatra ya le extrañaba que el virus durase tanto, resulta que tiene un párasito "primo hermano" de la Salmonella en la tripita que la estaba haciendo mucha pupita, la pobre se ha quedado en el "chasis".....ahora estamos con tratamiento de antibióticos para matar al dichoso "bicho" y en 10 dias volvemos con cultivo para ver si por fin salió de su tripita......esto de la maternidad y los niños ya sabes, no sales de una cuando estás con otra, no hay tregua!!!agotador!!!!!pero como lo haces tu con dos?????Eres mi heroína!!!!.....Un besote gordo para los 4 guapa!!!!

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    1. Pobrecita!! Tanto tiempo malita sí que tenía que tener algo fuera de lo normal. Espero que se recupere pronto y vuelva a coger esos kilillos.

      Y te entiendo con lo de la muñeca. La carita de felicidad de los peques es el mejor de nuestros regalos el día de Reyes. Y que se fastidien los maridos!!! Si es que tiene muy poca sensibilidad...

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  4. Que ganas tengo que a Ciruelilla le hada ilusión los regalos y comprarle lo que pida en la carta y ver su carita de alegría.... Pero por otro lado ... Que horror!!! Ahora se emociona con los envoltorios... Mucho más barato!! Jajaja. En fin que la ilusión de los niños es lo más emocionante de la Navidad.
    Un besazo madraza!!!

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    1. LLegará. Mucho antes de lo que cree se sentará delante de una catálogo de juguetes y te dirá: "Quero eto, y eto, y eto y etooooooo" jajaja

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  5. Yo también te entiendo, la peque de mis tres apenas acaba de cumplir los dos años y tiene clarísimo lo que quiere para los Reyes: bici, carro y zapatos (tacones de juguetes). Con esa cantinela llevamos desde que empezamos a hablar del tema y de ahí no salimos. El carro y los zapatos se los compré sin dudarlo, pero la bici me resistía... Tiene una hermana de casi 6 años a la que vamos a regalarle una bici nueva por su cumple, dentro de un mes, por lo que la suya pasaría a la peque ¿para que quiero dos bicis pequeñas de niña? y más aún teniendo en cuenta lo que vale... pues finalmente no he podido contenerme y después de días dándole vueltas al tema, esta mañana he hecho un nuevo pedido en amazon de una bici, pero se la he cogido de esas sin pedales, que cuestan menos de la mitad. Por lo menos que se encuentre con eso la mañana del 6 y ya el mes que viene tendrá la de pedales, cuando le adaptemos la de la hermana (está subida al máximo y sin ruedines). Mi marido también está mosqueado, pero yo no me quitaba de la cabeza la imagen de la peque buscando su deseada bici esa mañana....

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    1. A mí me parece que has hecho muy bien. Ella no va a entender que los Reyes no le hayan traído lo que ha pedido porque va a heredar de su hermana y esa bici sin pedales está realmente bien. Daniel la tiene y le encanta!! Seguro que la carita de alegría de la benjamina el día de Reyes le quita el mosqueo a tu marido...

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